Cuando te abrazan las palabras el mismo firmamento se acerca
hacia Ti.
Para mí, una de las mejores y auténticas armas que existen,
su pasión es determinante.
Lee un libro tocado con pasión, lee una frase tomada con
sentimiento y se te abrirá el corazón apasionadamente... ¿acaso no hay una
historia sobrecogedora? Entre un increíble libro, y un corazón que desea
vivirlo. Entre un buen libro, y un libro único, entre tu corazón y el mío
cuantos capítulos íbamos a navegar y sin rumbo fijo hacia un horizonte plagado
de historias por vivir...
La pasión de las palabras son el catalizador que determina que
algo sea realmente bueno, entonces... ¿por qué no oír su significado?
A veces por el qué dirán no escribimos lo que realmente
pensamos, en este caso, erramos. Imagina a un Vang Gogh que hubiera dejado de
pintar porque su obra no era entendida, nos hubiéramos quedado sin disfrutar de
una maravillosa noche Estrellada…
Otras veces, por miedo a nosotros mismos, en este caso,
¿erramos?.. ¿Cómo de potente puede ser la pasión que llegan a dar esas frases
al apasionado?.. ¿Debemos renunciar a ellas y su sentido?.. ¿Quizá aplacarla?..
¿O dejar que salga, que fluya sin mesura, a pesar de las consecuencias?...
Tenemos un mundo lleno de palabras que inevitablemente llegan a
cambiar el curso del destino de la humanidad, somos locos apasionados que
perdemos la realidad adentrándonos en la consciencia para ascender al éxtasis
de la creación donde existe ese sentimiento entre los silencios del alma... un
amor del que el poeta siente la melodía que entonan sus palabras...
Perder el control sobre tus sensaciones es ganar la capacidad de
adentrarse hacia un mundo de ensueño ya que este mundo invisible es mil veces
capaz de apasionarte, de permitir que otros escriban sobre tus pensamientos y
de valorar ese esfuerzo que ello conlleva el abrirse hacia los sentimientos
escritos en poesía, que en realidad es el ascensor a la comunicación de la
creación humana.
Quiero valorar las palabras, quiero sentirlas en cada una de
ellas, y quiero hacerlas sentir a los demás, transmitiendo las mías, te animo a
que te apuntes, a que las sientas y la compartas, te animo a ser primariamente
apasionado y capaz de sacar de tu interior todo lo que llevas dentro y te animo
a transmitir todo lo que sientes y lo que eres capaz de crear con ellas...
Estoy seguro de que por hacer esto abrirás a muchos corazones,
que simplemente lograras alcanzar palabra tras palabra una dedicación plena a
tu ser, que muchas veces se confunde con una filosofía abstracta, pero nada
más.
Se un ser apasionado con todo ese mundo de palabras, y serás un
ser real...